Política
Lugones eliminó las residencias y detona la crisis en el Hospital Garrahan
El ministro ultraderechista de Salud, las reemplazó por becas. Los médicos denuncian que no tendrán obra social, aportes jubilatorios, aguinaldo ni antigüedad en el hospital. Y advirtieron que esta medida lleva al cierre de la residencia pediátrica.

En las últimas horas el gobierno del presidente ultraderechista Javier Milei avanzó con una nueva provocación contra los trabajadores del Hospital Garrahan y ahora dispuso un cambio en el reglamento de residencias médicas para reemplazarlas por “becas”, que llevará al cierre de la residencia pediátrica del centro de salud. Así lo advirtieron los profesionales que se forman en el principal hospital pediátrico del país.
A través de una
resolución firmada por el ministro de Salud de la Nación Mario Lugones, se
dispuso un cambio en el reglamento del Sistema Nacional de Residencias Médicas
que implica que a partir de la próxima camada de profesionales (que ingresarán
en dos meses) ya no cobrarán residencias si no becas. El Ministerio de Salud pagará
una beca básica y los hospitales podrán ofrecer con fondos propios una mejor
para tentar a los profesionales.
Según publicó el
portal LPO, la medida afecta a todos los residentes de hospitales médicos
nacionales, pero es claramente una respuesta al largo conflicto en el Garrahan,
donde el gobierno forzó a los profesionales para que levanten las medidas de
fuerza bajo amenaza de quitarles los certificados.
Cabe remarcar que
esta medida del ministro liberticida se tomó a horas del inicio de la sesión en
la Cámara de Diputados de la Nación, en la que sobresalen la cuestión del
financiamiento universitario y la crisis en el Hospital Garrahan. Se debatirá
la sanción de un proyecto de Ley de Emergencia Pediátrica en todo el país.
Pasado el mediodía, el quorum se consiguió holgadamente, con 136 diputados
ubicados en sus bancas.
“Cerró la Residencia
de Pediatría del Garrahan”, alertaron los residentes a través de la cuenta
oficial del sector en la red social X, esta mañana.
“Sí, leíste bien.
El Ministerio de Salud decidió cerrar la residencia de pediatría más
prestigiosa del país, y lo hizo por la puerta de atrás: transformándolo en una
beca precarizada”, alertaron los residentes del Garrahan en el posteo en la red
social, antes llamada Twitter.
En la publicación,
explicaron que esta medida significa que “los residentes dejaremos de cobrar un
sueldo en blanco, no tendremos obra social, aportes jubilatorios, aguinaldo,
licencias y antigüedad en el hospital. A cambio, recibiremos un ‘estipendio’.
No es salario. No hay derechos laborales. No hay futuro”, advirtieron.
“La solución no
puede ser el retroceso. Desde el Ministerio nos aseguran que con ‘el sello
Garrahan’ es suficiente. Como si el prestigio pudiera pagar alquiler, comida o
salud. Como si los cuatro años de formación, guardias interminables y
responsabilidades clínicas pudieran pagarse con palmaditas en la espalda”,
plantearon los médicos residentes.
En esta línea, los
pediatras insistieron: “Sin residentes, el Garrahan no funciona. Esto no es
solo un ataque a los médicos en formación: es un intento de destruir el sistema
de residencias como lo conocemos, de precarizar aún más la salud pública”.
Desde la cartera
que conduce Lugones argumentaron que pretenden “recuperar el concepto de beca,
excluyendo cualquier encuadre como empleo público, relación laboral o
contratación de obra o servicio”. Al reducir la prestación a un concepto
meramente formativo, el gobierno les baja el rango a los residentes que no son
estudiantes sino profesionales.
“Esto va a ir en
detrimento del ingreso, muchos probablemente opten por no ingresar
directamente. Va a ser un problema serio”, advirtió Pedro Zubizarreta, jefe de
oncología del Garrahan, que calificó la medida como “un retroceso importante”.
Más allá de los
residentes, la crisis en el Garrahan continúa con el resto de los profesionales
que no recibieron ninguna mejora salarial. Los Profesionales y Técnicos del
Hospital Garrahan (APyT) hará paros los días 10 y 17 de julio, tras reuniones
donde Salud no envió a ningún representante para negociar los salarios.