La Policía de Misiones sigue con el operativo para dar con el paradero de Enrique Gabriel Del Roio, un niño de 10 años desaparecido desde el lunes por la mañana en Picada Mandarina, una zona rural de El Soberbio.

Según la madre, esta es la séptima vez que el menor se ausenta de su hogar, aunque en ocasiones anteriores regresó por sus propios medios.

La situación mantiene en alerta a toda la fuerza provincial, que desplegó a más de 200 efectivos.

Para intensificar el rastrillaje, se utilizan recursos tecnológicos avanzados, como drones equipados con cámaras térmicas, que permiten detectar focos de calor en zonas boscosas durante la noche.

Ante la escasa señal de comunicación en el área, los efectivos se valen de teléfonos satelitales Rugger, dispositivos resistentes y de alto alcance que garantizan la comunicación constante entre los equipos de búsqueda.

La búsqueda cuenta con la participación de múltiples divisiones policiales, incluidos efectivos del Grupo de Operaciones Especiales (GOE), Dirección Guardia Infantería, Defensa del Medio Ambiente, Patrullas Rurales y unidades montadas.

A ellos se suman rescatistas entrenados en búsquedas complejas y personal especializado en incursiones en monte cerrado, lo que demuestra la magnitud del esfuerzo.