Política
Diputados opositores impulsan una nueva ley de financiamiento universitario
El nuevo proyecto fue elaborado por el Consejo Interuniversitario Nacional y presentado en una reunión que organizó la diputada Blanca Osuna en conjunto con legisladores de los bloques de UP, EF, DpS, UCR, FIT y la CC. Solicitarán el emplazamiento en la próxima sesión. El año pasado, los tres diputados que no son de la Renovación, votaron a favor del veto de Milei contra una iniciativa similar, que meses antes, había sido impulsada por el radical Martín Arjol -antes de que se pase al oficialismo.

En un claro desafío a las políticas de ajuste y desfinanciamiento de la universidad pública que lleva adelante el gobierno ultraderechista de Javier Milei, un grupo de diputados opositores impulsan una nueva ley de Financiamiento Universitario, como el que fuera vetado el año pasado, con el apoyo de un tercio de la Cámara baja. El proyecto fue elaborado por el Consejo Interuniversitario Nacional y presentado en una reunión que organizó la diputada nacional Blanca Osuna en conjunto con legisladores de los bloques de UP, EF, DpS, UCR, FIT y la CC en la que recibieron a autoridades de universidades, sindicatos, docentes y estudiantes.
De acuerdo con el
portal Parlamentario, la diputada Osuna durante el encuentro en la Cámara de
Diputados, explicó que la idea es pedir el emplazamiento a las comisiones de
Educación y de Presupuesto y Hacienda en la sesión oficializada para el 4 de
junio. De conseguir el quórum y el voto afirmativo, pedirán que el 10 de junio
se realice una reunión conjunta de carácter informativa para poder dictaminar
el 11 de junio e ir al recinto, unos días más tarde, el 19 de ese mes.
Durante el 2024,
el tema había unido a distintos sectores de la oposición en una media sanción
que fue votada en Diputados el 15 de agosto, y se sancionó finalmente el 13 de
septiembre en el Senado. Sin embargo, el Gobierno vetó la norma que luego fue
blindada en el Congreso por el oficialismo gracias al apoyo de aliados con 159
votos afirmativos, 85 negativos y 5 abstenciones el pasado 9 de octubre.
Cabe recordar que en
ese blindaje al veto de Milei fue respaldado por la totalidad de los diputados
por Misiones: el radical “con peluca” – y profesor universitario – Martín Arjol,
la puertista liberticida Florencia Klipauka y el bullrichista Emmanuel
Bianchetti, votaron en contra de dejar sin efecto ese veto. Mientras que los
renovadores Carlos Fernández, Yamila Ruiz, Daniel Vancsik y Alberto Arrúa, se abstuvieron,
favoreciendo al veto de Milei.
Es un hecho consumado que ninguno de los
legisladores misioneros colaborará con el quorum para este proyecto, ello pese
a que, el año pasado, los renovadores y Arjol –antes de pasarse al oficialismo
ultraderechista– votaron a favor del primer proyecto que aseguraba el
financiamiento de las universidades públicas.
En la presentación
del proyecto, la vicepresidenta de la Comisión de Educación, Osuna explicó:
“Estamos frente a un gran desafío, frente al conflicto que genera el
desfinanciamiento de la educación. Que se contribuya a que efectivamente la
toma de conciencia sobre el valor de la educación, sobre el sentido de la
democracia, lo que significan los derechos, no se vacíen de contenido, estamos
en ese punto y riesgo”.
“Que el
cumplimiento y materialización de estas definiciones sobre educación, derechos
y democracia, al diluirse en una práctica que trae consecuencias que es el
desfinanciamiento, la destrucción de políticas activas, de algún modo, culmine
con el descreimiento total por el sentido de la democracia”, alertó la
legisladora.
En esta línea, la
entrerriana sostuvo: “Celebremos la política en el marco de lo son, de lo que
deben ser las mejores negociaciones para los mejores procesos políticos que
deben en beneficiar en este caso a estudiantes, docentes, etc. Una apelación
solidaria porque en momentos donde la crueldad y la violencia pretenden
imponerse, hay que ratificar un abrazo integral a todo el sistema educativo”,
sostuvo.
“El sistema
educativo son más que las universidades, vale la pena insistir porque el
sistema educativo son las universidades que son punta de lanza y terminan con
los niños que recién empiezan la escuela, con maestros mal pagos, con escuelas
que se caen, con falta de programas, ese sea el mayor desafío en nuestras manos
poder vertebrar toda la potencia posible para darle sentido a las negociaciones
y acuerdos con la mayor altura, en contrario a la coacción y aprietes”, recalcó
Osuna.
La diputada explicó
que presentaron una solicitud para que la comisión la integren legisladores de
distintos bloques porque “ese es el otro valor a destacar, la diversidad de la
representación nos da fuerza y lo hemos hecho reclamando ante al presidente de
la comisión de Educación y el de Presupuesto y Hacienda que se traten los
proyectos que obran en este cuerpo vinculados al financiamiento a la educación
superior, por sobre todo a las universidades”.
A su turno, la
vicepresidenta segunda de la Comisión de Educación, Danya Tavela, comentó que
la idea es “poder visibilizar el conflicto por el cual atraviesan las casas de
altos estudios y todo el sistema educativo y poder ponerle letra a la falta de
presupuesto que nos ocupa por segundo año consecutivo”.
“En el marco de la
unidad y el federalismo tenemos una representación amplia del sistema
universitario de todo el país y esto nos da fortaleza en el debate y discusión
de lo que se viene dentro en el Congreso y la sociedad”, adelantó.
Y remató: “Hay que
hacer unos kilómetros de los principales centros urbanos para desatacar el
valor que tiene la universidad dentro de cada sociedad, el impacto que tiene la
universidad argentina en casa región y las posibilidades de futuro. Queremos
defender al sistema de los ataques que tiene y construir un futuro que se
construye con igualdad de oportunidades, justicia y a partir de tener esa
herramienta de la posibilidad de acceder a la educación para emprender el
camino individual de la vida”.
Por su parte, el
presidente del Consejo Interuniversitario Nacional, Oscar Alpa, comentó:
“Decidimos armar un proyecto para transmitir al Congreso que, desde la reforma
universitaria, el no arancelamiento, la ceración de universidades, que pueda a
llegar que tengamos hoy a más de 2 millones de estudiantes, 50 mil son de
universidades públicas. Es el Congreso el que crea las universidades, el que
interviene, el que financia y audita por eso nos debemos como tal”.
“La educación
universitaria es el futuro de nuestro país, por lo tanto, el financiamiento del
sistema universitario es pensar qué futuro de país queremos. Es un sistema tan
eficiente y eficaz, con calidad de nuestros graduados y que lamentablemente del
histórico 0,8%, que siempre esperamos llegar al 1% del PBI, hoy tenemos el
0,45% de esa inversión, esa pérdida del tercio”, detalló.
Alpa indicó: “Este
proyecto muestra que la universidad pública argentina, es sistema, está unido
para seguir debatiendo y en esa discusión de futuro de qué país queremos. La
universidad argentina es pública, es no arancelada y buscando lo que implica un
sistema de becas totalmente desactualizado”.
Así, agradeció y
recordó la Ley 27.757 del año pasado que fue finalmente vetada por el Gobierno:
“Fue una ley que, por el sistema constitucional, luego fue vetada, pero tuvo su
aprobación de parte de diputados y senadores con una alta aprobación que es la
representación del pueblo argentino a través de los representantes del
Congreso”.
“Hoy queremos
insistir, pero insistir inclusive con alguna alternativa de fuente de
financiamiento”, remarcó y sumó: “Esta propuesta que estamos haciendo es
similar en cuanto a que recordemos que se ha perdido el 33% de porcentaje de
salario real docente y no docente”.
“Hubo una
actualización que implicó poner al día respecto de la inflación del 2023, pero
ahora no falta el 118% de la inflación del año pasado que, inclusive, por la
forma que se distribuyó este presupuesto prorrogado en los primeros cuatro
meses de este año estamos recibiendo las universidades nominalmente un 30%
menos nominalmente”, indicó.
En esa línea,
señaló que “también está la propuesta de actualización desde aquel momento
manteniendo el equilibrio fiscal sin creación de impuestos. Es buscar una forma
de asignación directa de los ingresos para que tengan una base para el sistema
universitario, que la base del último presupuesto aprobado del 2023. Esa es la
propuesta sin tocar absolutamente ni un impuesto ni coparticipación que le
corresponde a las provincias”.
“Desde noviembre
2023 hasta enero del 2025 en números redondos con un 180% de inflación, los
aumentos salariales fueron del 90% con lo cual hubo una pérdida del 90%, pero
los ingresos tributarios aumentaron 210%, o sea, que ahí también es otra fuente
de financiamiento que es el ingreso real de los impuestos tributarios sobre el
ingreso prorrogado”, explicó.
También comentó
que proponen un fondo para las carreras estratégicas, para que haya becas para
que haya presupuesto, para esas carreras. “Seguimos trabajando en un sistema
universitario público que esté pensando en las políticas de nuestro país. Es un
aporte para que podamos tener una ley que asegure lo que dice la constitución
respecto de la autonomía y autarquía universitaria”, cerró.
A su turno, el representante
de la Federación Universitaria Argentina, Joaquín Carballo, gremio que nuclea a
estudiantes del país, indicó: “Tenemos un sistema universitario con carácter
federal por eso discutir esto en el Congreso está a tono. Quisiéramos que esta
situación con las universidades estuviese resuelta, pero lamentablemente en
2024 nos encontramos con un veto presidencial, luego de que sea aprobada en
ambas cámaras. Es una clara postura del gobierno de dónde está puesta la
prioridad”.
“Un país que se
precie de tal, no puede no invertir en educación si piensa que tiene que estar
en la senda del desarrollo. Me pregunto cuál es el modelo de desarrollo que
está mirando el Gobierno nacional. Eso nos preocupa”, criticó y sumó: “Hay una
situación crítica con las becas universitarias que en muchos lugares se
utilizan en cada una de las áreas donde un estudiante tiene que destinar su
presupuesto. Hoy hablamos de dos becas nacionales PROGRESAR y Manuel Belgrano
congeladas en $35 mil y $81 pesos”, remató.