En crisis y con riesgo de no poder continuar con su actividad, centros y terapeutas en discapacidad salieron a hacer visible su reclamo por la falta de pagos de las obras sociales, que están reduciendo o cortando la cobertura para familias de niños y adolescentes con discapacidad.

En diálogo con LT4, Marcela Tiozo, la directora de la Fundación Logros, habló de la cruda situación que padecen las familias, por el ajuste en las coberturas y el desinterés de la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación. “Estamos acá todos reunidos, hay terapeutas, centros, familias con chicos con discapacidad que estamos luchando por los derechos que están siendo vulnerados”, confió Tiozo.

“En este momento realmente está siendo insostenible, todos los gastos que estamos teniendo y no tenemos respuesta de las obras sociales”, confió la directora, añadiendo que “no hay pagos, hay reducción de las terapias y no tenemos respuesta ni de las obras sociales ni de la superintendencia.”

De acuerdo con Tiozo, “en este momento nuestra cuenta (bancaria) está en cero, sinceramente. Y en un par de días tenemos que pagar sueldos y no tenemos de dónde sacar (dinero). Tenemos que pensar o pedir un préstamo o no sé, porque en la cuenta nuestra ya no hay ingresos de las obras sociales”, señaló.

Según Tiozo, la fundación Logros trabaja desde hace 10 años, y cuenta con más de 25 terapeutas y unas 65 maestras, para un total de unas 100 personas trabajando actualmente. Sólo trabajan con niños y adolescentes con discapacidad.

“Hay veces que tenemos que enfrentar distintas situaciones; hay veces que las obras sociales no le cubren. Trabajamos con ese niño un mes, dos meses, tres meses hasta que la obra social nos rechaza y tenemos que decir a ese niño o, a ese padre, que tiene que seguir abonando de manera particular o suspender las terapias. Esto pasa un montón”, describió Tiozo, sobre las situaciones que enfrentan por el recorte en las prestaciones, con la anuencia del Estado nacional.

Asimismo, otro problema que enfrenta la fundación y las familias de personas con discapacidad, es la demora en los pagos autorizados. “Hay veces que tenemos la autorización, presentamos las facturas, pero no nos pagan, no nos abonan, y pasan meses, meses y meses. Las obras sociales que tienen atrasos hasta cinco o seis meses, entonces es insostenible porque tenemos que pagar sueldos, que pagar el alquiler, luz, los servicios, un montón de cuestiones, aparte del material que también utilizamos para trabajar con el niño. Entonces realmente es una situación muy preocupante”, manifestó Tiozo. 

Repreguntada sobre los efectos de la suspensión de las terapias, Tiozo confirmó que se ven retrocesos en los chicos, toda vez que deben dejar los tratamientos. “Hay veces que los chicos están sin terapias justamente por esta cuestión de que no se autorizan estos meses sin terapias y hay un retroceso”, describió.

Para Tiozo, el reclamo que están haciendo es para que las obras sociales y el Estado tomen cartas en el asunto y establezcan un canal de diálogo con las familias y las instituciones dedicadas a la discapacidad. “Pedimos ser escuchados. Realmente que se involucren, que haya una preocupación y ocupación de esta situación. Porque no es solo la falta de pago, es toda la falta de interés en general para solucionar esta situación”, advirtió.

“Hay muchas familias que están involucradas directamente, no solo de las personas con discapacidad, sino muchos trabajadores que dependen de esto y no cobran a fin de mes. Pasan meses sin cobrar y esas personas tienen su familia que mantener, la situación es  muy amplia”, explicó Tiozo, apuntando al otro aspecto del desfinanciamiento del trabajo en el área de discapacidad.