Deportes
Carta abierta al “periodista” Álvaro Morales
Columna de opinión del Dr. Libero Antonio Oropallo, médico personal de Lionel Messi.

Estimado señor Morales (si todavía se siente cómodo con ese título):
Veo que está muy preocupado
por el retiro de Lionel Messi. Respire. Lo entiendo: verle seguir jugando con
casi la misma magia de siempre debe provocarle cierto cortocircuito emocional.
Pero le traigo malas noticias: Messi sigue. Y usted, lamentablemente, también
tendrá que seguir viéndolo.
Es curioso cómo alguien tan
indignado por el rendimiento de un genio se olvida de todo lo que nos regaló.
Tal vez se le cayó la memoria en alguna redacción, o se le derramó el respeto
en una taza de café. Messi no solo nos dio goles imposibles y jugadas que
parecen salidas de una novela, sino que además construyó una familia ejemplar y
representa los valores que tanto le faltan a muchos que opinan desde el
resentimiento.
Como su médico personal,
puedo decirle que recientemente atravesó un problema orgánico que ya está en
vías de solución. Sí, algo que se resuelve. A diferencia de su problema, que
parece más bien del alma… o del ego.
Y por si fuera poco, se ve su
total falta de objetividad cuando dice admirar a Cristiano Ronaldo pero no a
Messi, simplemente porque el equipo de Ronaldo “perdió solo por un gol”. Señor
antiMessi, eso no es periodismo: es una rabieta mal maquillada. Usted es, con
todo respeto, simplemente ridículo.
Pero no se preocupe: mientras
usted grita desde sus columnas, nosotros —los que lo amamos, lo entendemos y lo
admiramos— lo vamos a seguir defendiendo. Porque Messi fue, es y será siempre
el número uno. Aunque a usted le arda. Y sí, parece que le arde bastante.
Así que hágase a la idea:
Messi sigue jugando. Sigue brillando. Y si alguien va a necesitar una silla de
ruedas, será usted… no por la edad, sino de tanto temblar cada vez que lo vea
hacer magia con la pelota.
Con afecto profesional (y una
dosis justa de sarcasmo),
Médico personal de Lionel Messi