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Advierten que “la asistencia social no es seria, hay una mafia de mercadería”

Lo aseguró Fabricio Tejerina de Barrios de Pie. “No hay ningún político pobre en Misiones, mientras que la población está cada vez más empobrecida y sin trabajo”, sentenció.
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Por IR

Junto a la pobreza, crece la demanda en los merenderos. Así lo sostuvo Fabricio Tejerina, integrante  Barrios de Pie, que agregó que la asistencia a estos espacios es cada vez mayor y evidencia que el índice de indigencia está en incremento. La situación es crítica porque “tampoco hay trabajo”, resaltó en LT 4.


Para Tejerina “la asistencia social no es seria en Misiones, hay una mafia de mercadería. No sabemos dónde van, si a los chinos o qué pasa”.  Aseveró que desde su organización han denunciado pero “no hubo respuestas, pareciera que no tienen intención en resolver esta situación”, expresó.


También cuestionó a la dirigencia: “No hay ningún político pobre en Misiones, se puede recorrer sus casas y son todas mansiones. Mientras que la población está cada vez más empobrecida y sin trabajo”, sentenció.



Desabastecimiento de leche

Día a día la demanda se multiplica en los merenderos,  a los que asisten a diario  cientos de niños en busca de un trozo de pan y una taza de leche  y, pese al esfuerzo mancomunado, peligran las respuestas.  “Desde hace dos semanas, Desarrollo Social de la Provincia, no entrega leche y ha descendido la cantidad de mercadería que envía Nación”, dijo Tejerina. La situación es crítica porque “tampoco hay trabajo”, resaltó.


Conforme se deterioran los indicadores socioeconómicos, se multiplica la cantidad de niños y niñas que asisten en busca de la merienda o el almuerzo diario. “Así no hay olla que alcance”, describió.



Adicciones, otra problemática

Ante el agravamiento de las condiciones sociales, que han impactado de manera radical en la vida de los sectores populares, “el consumo de drogas, también crece”, señaló el dirigente. La postal es cotidiana y se repite en los diferentes barrios de la ciudad. A lo largo y a lo ancho del ejido urbano local. “Nos da mucho temor el paco, aún no lo vemos popularizado, pero  es una droga que destruye el cerebro de los chicos, quedan como ´zombie´ y pueden hacer cualquier cosa”.


Si bien es preocupante el consumo también es alarmante su venta, es que según Tejerina,l a comercialización de los estupefacientes “es un delito pero que permite el acceso a dinero de manera rápida y fácil en un contexto complejo”. “Para las estadísticas son los giles los caen, no hay ningún capo en la cárcel. Los que están detenidos el 99% no terminó la primaria o secundaria, son los ladrones de gallinas los que están preso. Lo que refleja también, la realidad de la Justicia de Misiones”, concluyó.

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